Un mal inicio castiga al Atlético en el Ciutat de Valencia
Los tempraneros goles de Valdo y Koné en apenas nueve minutos obligaron a los rojiblancos a ir a remolque y, aunque dominaron, no pudieron acortar distancias
El Atlético de Madrid pagó caro su mal inicio de partido en el Ciutat de Valencia y dejó escapar tres puntos de oro ante el Levante. Los granotas se encontraron pronto el duelo de cara merced a dos grandes centros de Barkero. En el primero Valdo se adelantó a la zaga rojiblanca para cabecear a la base del palo sin que nada pudiera hacer Courtois por evitar el tanto. Apenas se llevaba un minuto de juego y el encuentro se ponía cuesta arriba para el Atlético. Pero a los nueve minutos aún se complicó más cuando el zurdo del Levante puso una falta medida al área para que Koné cabeceara a bocajarro el segundo tanto.
Los de Simeone trataron de reaccionar ante estos dos mazazos y se hicieron con el dominio del balón. Arda y Diego se echaron el equipo a sus espaldas y trataron de buscar a Adrián y Salvio, pero la zaga local se replegaba perfectamente sobre su área y complicaba muchísimo la circulación rojiblanca. Salvio tuvo la mejor ocasión al rematar un balón suelto en un saque de esquina, pero su disparo a gol se encontró con la espalda de un defensor granota.
Los atléticos se lanzaron en busca del gol que les metiera en el partido, lo que provocó que el equipo valenciano disfrutara de más espacio para sus contras y en una de ellas Barkero lanzó al limbo una asistencia de Valdo. El susto no amedrentó a los de Simeone, que siguieron intentando recortar distancias. Al borde del descanso Miranda pudo hacerlo, pero su cabezazo en el borde del área pequeña se fue desviado.
Tras el paso por los vestuarios el Atlético salió a por todas y metió al Levante en su área. En los primeros minutos de la segunda mitad los rojiblancos disfrutaron de un par de claras ocasiones para acortar la ventaja local, pero la mala suerte y un enorme Munúa lo evitaron. El meta sacó un centro de Salvio que rozó Adrián y posteriormente Arda se jugó el físico en el rechace, pero su remate se fue fuera en el 50'. Un minuto después el propio Turan soltó un zapatazo desde la frontal que el portero rechazó como pudo a córner, y en ese mismo saque de esquina Miranda remató desviado un esférico que se había tragado el citado Munúa. Eran momentos de dominio rojiblanco y en los que parecía que el gol llegaría en cualquier momento.
Simeone, que no puso a Falcao de inicio por sus molestias físicas, se jugó el todo por el todo dando entrada al delantero colombiano para buscar la remontada. El 'Tigre' demostró su peligro desde el primer instante en que pisó el césped, volviendo loco a Ballesteros por su movilidad y empuje, aunque no consiguió el merecido premio del gol. Dos cabezazos suyos en el primer y segundo palo adelantándose al central local se fueron fuera. Precedieron a su ocasión más clara. Diego botó una falta a la perfección para que el colombiano se elevara, picara abajo el remate de cabeza y se encontrara con el paradón matinal de Munúa, que sacó una mano prodigiosa para evitar el 2-1.
Para entonces el Atlético ya se había quedado con diez jugadores tras ver Miranda dos amarillas en diez minutos (72' y 82'). Pero ni siquiera en inferioridad numérica el equipo rojiblanco dejó de remar en busca de acortar distancias. Peleó hasta el último minuto, teniendo una ocasión final de Diego que peinó en el área pequeña un centro de Juanfran, pero no encontró portería.
Los de Simeone trataron de reaccionar ante estos dos mazazos y se hicieron con el dominio del balón. Arda y Diego se echaron el equipo a sus espaldas y trataron de buscar a Adrián y Salvio, pero la zaga local se replegaba perfectamente sobre su área y complicaba muchísimo la circulación rojiblanca. Salvio tuvo la mejor ocasión al rematar un balón suelto en un saque de esquina, pero su disparo a gol se encontró con la espalda de un defensor granota.
Los atléticos se lanzaron en busca del gol que les metiera en el partido, lo que provocó que el equipo valenciano disfrutara de más espacio para sus contras y en una de ellas Barkero lanzó al limbo una asistencia de Valdo. El susto no amedrentó a los de Simeone, que siguieron intentando recortar distancias. Al borde del descanso Miranda pudo hacerlo, pero su cabezazo en el borde del área pequeña se fue desviado.
Tras el paso por los vestuarios el Atlético salió a por todas y metió al Levante en su área. En los primeros minutos de la segunda mitad los rojiblancos disfrutaron de un par de claras ocasiones para acortar la ventaja local, pero la mala suerte y un enorme Munúa lo evitaron. El meta sacó un centro de Salvio que rozó Adrián y posteriormente Arda se jugó el físico en el rechace, pero su remate se fue fuera en el 50'. Un minuto después el propio Turan soltó un zapatazo desde la frontal que el portero rechazó como pudo a córner, y en ese mismo saque de esquina Miranda remató desviado un esférico que se había tragado el citado Munúa. Eran momentos de dominio rojiblanco y en los que parecía que el gol llegaría en cualquier momento.
Simeone, que no puso a Falcao de inicio por sus molestias físicas, se jugó el todo por el todo dando entrada al delantero colombiano para buscar la remontada. El 'Tigre' demostró su peligro desde el primer instante en que pisó el césped, volviendo loco a Ballesteros por su movilidad y empuje, aunque no consiguió el merecido premio del gol. Dos cabezazos suyos en el primer y segundo palo adelantándose al central local se fueron fuera. Precedieron a su ocasión más clara. Diego botó una falta a la perfección para que el colombiano se elevara, picara abajo el remate de cabeza y se encontrara con el paradón matinal de Munúa, que sacó una mano prodigiosa para evitar el 2-1.
Para entonces el Atlético ya se había quedado con diez jugadores tras ver Miranda dos amarillas en diez minutos (72' y 82'). Pero ni siquiera en inferioridad numérica el equipo rojiblanco dejó de remar en busca de acortar distancias. Peleó hasta el último minuto, teniendo una ocasión final de Diego que peinó en el área pequeña un centro de Juanfran, pero no encontró portería.
