Samuel Eto'o está que se sale. El 'hat trick' del miércoles ante el Werder Bremen, primero que consigue en la Champions con el Inter tras hacerlo ya con el Barça, confirmó su impresionante momento de forma desde el inicio de la temporada. Sus números con la camiseta 'nerazzurra' hablan por sí solos: once goles en nueve partidos, pichichi de la Serie A con cinco en otras tantas jornadas y también máximo realizador europeo con cuatro tantos en dos encuentros. Antes vio puerta dos veces en la Supercoppa. El año pasado en octubre llevaba cuatro 'dianas'. No hay duda: el ex azulgrana es el delantero de moda.

'¡Rafa, déjalo!', se leía ayer en el editorial de La Gazzetta dello Sport a modo de súplica para que el técnico español dé absoluta libertad al camerunés. En ausencia del lesionado Diego Milito, Benítez alineó de '9' nato a Eto'o y éste, como en sus mejores tiempos, ofreció un recital goleador que rubricó con la asistencia del 3-0 a Wesley Sneijder, su gran aliado.

Pero Benítez ya dejó claro tras el partido que, cuando Milito se recupere, el sitio de Eto'o volverá a estar en la banda izqquierda. Eso sí, con mucha más libertad de la que la pasada temporada le dio Jose Mourinho, quien le condenaba a funciones defensivas.

Benítez ha hecho caso a Eto'o, que le pidió jugar más cerca de portería pero, ya habituado a desenvolverse por la banda con Mou y sin molestias físicas, desequilibra a los rivales con su constante movilidad, asiste y amplia su repertorio incluso con goles desde fuera del área. Su extraordinario momento opaca algo el también destacable rendimiento de Zlatan Ibrahimovic en el Milan. El sueco lleva cinco tantos (dos en Serie A y tres en Champions) en sus seis partidos desde que dejó el Barça.