El Atlético plantó cara al Real Madrid, pero no pudo con el acierto rematador del conjunto blanco (3-2)
Los goles de Reyes y Forlán no fueron suficientes para conseguir la victoria
El Atlético de Madrid volvió a caer en el Santiago Bernabéu de manera injusta ante un Real Madrid, que sólo fue superior en la pegada, ante un equipo rojiblanco, que acusó las lesiones de Valera y Reyes, y un mal inicio de la segunda parte.
El Atlético de Madrid llegaba al encuentro con las ideas muy claras. Sabía lo que debía hacer para ganarle al Real Madrid. Tomó como referencia sus encuentros ante el Barcelona y el Valencia y lo plasmó en el Bernabéu. Las líneas muy juntas y presionando al conjunto blanco en la parcela ancha. No le dejó moverse con comodidad y el conjunto blanco se las veía y se las deseaba para superar al Atlético. Manuel Pellegrini infravaloró a su adversario, ya que no sabía qué indicarles a sus jugadores para que pudieran superar el centro del campo rojiblanco.
Tiago fue el ‘jefe’ en el medio. El portugués no paró de dar órdenes a sus compañeros. En todas las jugadas estaba el jugador para aconsejar lo mejor para sus compañeros. De sus botas salió el primer gol del Atlético. Antonio López sacó a Simao, éste se la dio a Tiago, que vio el desmarque del Kun. El argentino vio sólo a Reyes y el sevillano la colocó al fondo de la red. El Atlético se ponía por delante en el marcador y encaraba el encuentro con superioridad.
Pero eso no influyó en su juego del Atlético de Madrid. Siguió en la misma línea. Con un centro del campo presionando arriba y dos jugadores sobre los adversarios. Ni Ronaldo ni Higuaín recibían balones. El portugués comenzaba a preocuparse y bajaba para recibir, pero ni por esas veía el balón. Sólo había un color: el rojiblanco. El único ‘pero’ que se le podía poner a los de Quique es que no creyeran un poco más en sus posibilidades en el ataque para intentar aumentar la escasa renta.
Los minutos pasaban y si había un equipo que podía marcar ese era el Atlético. La defensa apenas tenía problemas para sujetar a los delanteros. Quique ya lo había avisado en la previa del encuentro. Los de arriba no podían recibir y así fue. El Real Madrid lo intentó una y otra vez por su banda izquierda, pero ahí estaban Valera y Reyes para impedir cualquier aproximación.
De Gea estaba siendo un espectador de excepción. Pero aunque el juego del Real Madrid no era bueno, la calidad de sus jugadores está ahí. En el minuto 36 Marcelo pudo empatar el choque, pero apareció De Gea. Una excelente parada del joven guardameta impidió el gol. En el posterior saque de esquina fue Higuaín el que golpeó, pero de nuevo estaba en su sitio el joven guardameta para impedir el gol.
El encuentro estaba acabando en sus primeros minutos. El Atlético fue creyendo en sus posibilidades e inquietó a Casillas. Forlán en el minuto 40 de vaselina pudo conseguirlo, pero fue muy leve su disparo y no tuvo problemas el meta del Real Madrid para detener. En esa jugada caía lesionado Juan Valera por una lesión muscular. Perea salió en su lugar, pero el esquema siguió igual. Dos minutos después un centro del colombiano era rematado por Forlán. El tiempo estaba casi terminado, pero Ronaldo tuvo una ocasión de cabeza que salió fuera por muy poco.
La segunda parte se inició con un nuevo problema para el Atlético de Madrid. Reyes, con una lesión muscular, igual que Valera, tenía que dejar su sitio a Jurado. Mala suerte para el Atlético que veía como las lesiones podían más con ellos que el Real Madrid.
Lo peor para los intereses rojiblancos llegó al poco de iniciarse la segunda mitad. Fue en el minuto 48, Xabi Alonso en la línea de gol, empujaba un cabezazo de Sergio Ramos para igualar el encuentro. Demasiado premio para los de Pellegrini. El gol espoleó a los locales frente a un equipo rojiblanco que no lo esperaba y que tardó en reaccionar. Las lesiones de Valera y Reyes fueron un contratiempo difícil de superar.
En el minuto 54 Arbeloa rompía el fuera de juego y se colaba en el área, y tras regatear a Domínguez superaba a De Gea para adelantarse en el marcador. A partir de ahí el Atlético volvió al planteamiento inicial. Poco a poco comenzaba a estar en su sitio en el campo. Le estaba costando recuperarse de esos mazazos, cuando Tiago perdió un balón en la frontal del área, e Higuaín lo aprovechó para marcar el tercero. No era justa esa ventaja para el Real Madrid.
Quedaba mucho encuentro y el Atlético de Madrid no quería volver a casa con una derrota. Tiró de orgullo y pundonor para acercarse a las inmediaciones de Casillas. Sería de penalti cuando Forlán acortó distancias. Había encuentro y había posibilidades, pues el Real Madrid demostró tener acierto rematador, pero escaso juego colectivo. Todo su ataque lo basaba en los lanzamientos de falta de Ronaldo.
Quique tiró de banquillo e introdujo a Salvio para darle más rapidez al ataque rojiblanco. Simao había realizado un gran encuentro, pero estaba cansado para intentar forzar alguna jugada de ataque, así pues con la entrada del argentino, el técnico rojiblanco intentó que su ataque tuviera un poco más de ‘mordiente’ y velocidad. Pero el Real Madrid quería dormir el partido y que concluyera lo antes posible, ya que no veía claro poder obtener el triunfo. Lo peor para los intereses rojiblancos es que los minutos pasaban y el tiempo se estaba acabando y al final vio como caía derrotado por la mínima.
REAL MADRID, 3 (Xabi Alonso, Arbeloa e Higuaín); ATLÉTICO DE MADRID, 2 (Reyes, Forlán de penalti)
Real Madrid: Casillas, Sergio Ramos, Arbeloa, Raúl Albiol, Marcelo; Gago, Alonso, Granero (Guti, 81’), Van Der Vaart (Raúl, 76’); Ronaldo e Higuaín (Diarra, 88’).
Atlético de Madrid: De Gea; Valera (Perea, 41’), Ujfalusi, Domínguez, Antonio López; Assunçao, Tiago, Reyes (Jurado, 46’), Simao (Salvio, 77’); Forlán y Agüero.
Árbitro: Undiano Mallenco (Colegio Navarro). Por parte del Real Madrid mostró tarjeta amarilla a Arbeloa (40’), Sergio Ramos (83’) Xabi Alonso (84’); en las filas del Atlético de Madrid a Perea (45’)
Incidencias: Santiago Bernabéu. Buena entrada. Partido correspondiente a la jornada 29. Alrededor de 1000 seguidores rojiblancas en las gradas.
GOLES
0-1 (9’). Reyes desde la frontal del área.
1-1 (48’). Xabi Alonso en la raya de gol.
2-1 (54’). Arbeloa rompe el fuera de juego y desde dentro del área supera a De Gea.
3-1 (61’). Higuaín roba un balón en la frontal del área y bate a De Gea.
3-2 (67’). Forlán, de penalti.
El Atlético de Madrid llegaba al encuentro con las ideas muy claras. Sabía lo que debía hacer para ganarle al Real Madrid. Tomó como referencia sus encuentros ante el Barcelona y el Valencia y lo plasmó en el Bernabéu. Las líneas muy juntas y presionando al conjunto blanco en la parcela ancha. No le dejó moverse con comodidad y el conjunto blanco se las veía y se las deseaba para superar al Atlético. Manuel Pellegrini infravaloró a su adversario, ya que no sabía qué indicarles a sus jugadores para que pudieran superar el centro del campo rojiblanco.
Tiago fue el ‘jefe’ en el medio. El portugués no paró de dar órdenes a sus compañeros. En todas las jugadas estaba el jugador para aconsejar lo mejor para sus compañeros. De sus botas salió el primer gol del Atlético. Antonio López sacó a Simao, éste se la dio a Tiago, que vio el desmarque del Kun. El argentino vio sólo a Reyes y el sevillano la colocó al fondo de la red. El Atlético se ponía por delante en el marcador y encaraba el encuentro con superioridad.
Pero eso no influyó en su juego del Atlético de Madrid. Siguió en la misma línea. Con un centro del campo presionando arriba y dos jugadores sobre los adversarios. Ni Ronaldo ni Higuaín recibían balones. El portugués comenzaba a preocuparse y bajaba para recibir, pero ni por esas veía el balón. Sólo había un color: el rojiblanco. El único ‘pero’ que se le podía poner a los de Quique es que no creyeran un poco más en sus posibilidades en el ataque para intentar aumentar la escasa renta.
Los minutos pasaban y si había un equipo que podía marcar ese era el Atlético. La defensa apenas tenía problemas para sujetar a los delanteros. Quique ya lo había avisado en la previa del encuentro. Los de arriba no podían recibir y así fue. El Real Madrid lo intentó una y otra vez por su banda izquierda, pero ahí estaban Valera y Reyes para impedir cualquier aproximación.
De Gea estaba siendo un espectador de excepción. Pero aunque el juego del Real Madrid no era bueno, la calidad de sus jugadores está ahí. En el minuto 36 Marcelo pudo empatar el choque, pero apareció De Gea. Una excelente parada del joven guardameta impidió el gol. En el posterior saque de esquina fue Higuaín el que golpeó, pero de nuevo estaba en su sitio el joven guardameta para impedir el gol.
El encuentro estaba acabando en sus primeros minutos. El Atlético fue creyendo en sus posibilidades e inquietó a Casillas. Forlán en el minuto 40 de vaselina pudo conseguirlo, pero fue muy leve su disparo y no tuvo problemas el meta del Real Madrid para detener. En esa jugada caía lesionado Juan Valera por una lesión muscular. Perea salió en su lugar, pero el esquema siguió igual. Dos minutos después un centro del colombiano era rematado por Forlán. El tiempo estaba casi terminado, pero Ronaldo tuvo una ocasión de cabeza que salió fuera por muy poco.
La segunda parte se inició con un nuevo problema para el Atlético de Madrid. Reyes, con una lesión muscular, igual que Valera, tenía que dejar su sitio a Jurado. Mala suerte para el Atlético que veía como las lesiones podían más con ellos que el Real Madrid.
Lo peor para los intereses rojiblancos llegó al poco de iniciarse la segunda mitad. Fue en el minuto 48, Xabi Alonso en la línea de gol, empujaba un cabezazo de Sergio Ramos para igualar el encuentro. Demasiado premio para los de Pellegrini. El gol espoleó a los locales frente a un equipo rojiblanco que no lo esperaba y que tardó en reaccionar. Las lesiones de Valera y Reyes fueron un contratiempo difícil de superar.
En el minuto 54 Arbeloa rompía el fuera de juego y se colaba en el área, y tras regatear a Domínguez superaba a De Gea para adelantarse en el marcador. A partir de ahí el Atlético volvió al planteamiento inicial. Poco a poco comenzaba a estar en su sitio en el campo. Le estaba costando recuperarse de esos mazazos, cuando Tiago perdió un balón en la frontal del área, e Higuaín lo aprovechó para marcar el tercero. No era justa esa ventaja para el Real Madrid.
Quedaba mucho encuentro y el Atlético de Madrid no quería volver a casa con una derrota. Tiró de orgullo y pundonor para acercarse a las inmediaciones de Casillas. Sería de penalti cuando Forlán acortó distancias. Había encuentro y había posibilidades, pues el Real Madrid demostró tener acierto rematador, pero escaso juego colectivo. Todo su ataque lo basaba en los lanzamientos de falta de Ronaldo.
Quique tiró de banquillo e introdujo a Salvio para darle más rapidez al ataque rojiblanco. Simao había realizado un gran encuentro, pero estaba cansado para intentar forzar alguna jugada de ataque, así pues con la entrada del argentino, el técnico rojiblanco intentó que su ataque tuviera un poco más de ‘mordiente’ y velocidad. Pero el Real Madrid quería dormir el partido y que concluyera lo antes posible, ya que no veía claro poder obtener el triunfo. Lo peor para los intereses rojiblancos es que los minutos pasaban y el tiempo se estaba acabando y al final vio como caía derrotado por la mínima.
REAL MADRID, 3 (Xabi Alonso, Arbeloa e Higuaín); ATLÉTICO DE MADRID, 2 (Reyes, Forlán de penalti)
Real Madrid: Casillas, Sergio Ramos, Arbeloa, Raúl Albiol, Marcelo; Gago, Alonso, Granero (Guti, 81’), Van Der Vaart (Raúl, 76’); Ronaldo e Higuaín (Diarra, 88’).
Atlético de Madrid: De Gea; Valera (Perea, 41’), Ujfalusi, Domínguez, Antonio López; Assunçao, Tiago, Reyes (Jurado, 46’), Simao (Salvio, 77’); Forlán y Agüero.
Árbitro: Undiano Mallenco (Colegio Navarro). Por parte del Real Madrid mostró tarjeta amarilla a Arbeloa (40’), Sergio Ramos (83’) Xabi Alonso (84’); en las filas del Atlético de Madrid a Perea (45’)
Incidencias: Santiago Bernabéu. Buena entrada. Partido correspondiente a la jornada 29. Alrededor de 1000 seguidores rojiblancas en las gradas.
GOLES
0-1 (9’). Reyes desde la frontal del área.
1-1 (48’). Xabi Alonso en la raya de gol.
2-1 (54’). Arbeloa rompe el fuera de juego y desde dentro del área supera a De Gea.
3-1 (61’). Higuaín roba un balón en la frontal del área y bate a De Gea.
3-2 (67’). Forlán, de penalti.